martes, 11 de abril de 2017

II Desafió UTBN


Aventura inesperada…, esta ha sido una aventura inesperada, en principio mi idea era ir a correr una carrera al Torcal de Antequera, llamé a Antonio de Nerja y le comenté si iba a ir, pero me dijo que su intención era correr el UTBN, le pregunté -que era eso? y lo más importante, cuando, ya que salía de Huesca el viernes por la tarde y me bajaba a Velez-Málaga del tirón,- ¿cuando?, me dijo que era el sábado a las 00.00, le comenté que eso me venía mejor, ya que podía descansar un poco más del viaje, comentó que estaba restringida la participación, pero se lo comento a Robert y dio su beneplácito.
 Tras esta decisión muy a la ligera, me instalé el telegram para seguir las incidencias de esta “locura” y la verdad me fui arrepintiendo en algún momento, ya que eran unos cuantos kilómetros con los que no contaba, además tenía ya otros dos desafíos este mes, una la semana anterior de 52km. en el camino Natural del Somontano, desde Alquezar y otro de unos 80km. el 23 de este mes, así que meterse 90 sin esperárselo no era una tontería, además veía que algunos se iban dando de baja de esta aventura, pero el caso es que resistí por las ganas de disfrutar de estas Sierras y de conocer nuevos locos de la montaña, la verdad todo un acierto.
El caso es que a las 4 de la tarde salí con la furgoneta carga de Siétamo, un pueblo a 10 km. de Huesca, el viaje del tirón hasta Velez, casi a las 2 de la madrugada estábamos descargando la furgo, entre una cosa y otra hasta las 3 no estaba en la piltra. La mañana la ocupé en preparar todo y comprar algo para picar, y después de comer me acercaron a Torre del Mar donde había quedado con Antonio para ir a Nerja, aquí tomando un cafecito fueron llegando algunos de los  “máquinas” que nos iban a acompañar, Javier y Daniel de Nerja, y Pablo, que casualmente vivía en Velez, y con el que seguro que a partir de ahora compartiré muchos kilómetros, en mis estancias en esta tierra.
Salimos en el bus a Granada en un viaje que debió durar más de dos horas, que se nos pasaron muy rápido compartiendo una agradable charla  y observando el paisaje por la carretera vieja, una vez llegamos a la estación un bus nos dejó en las cercanías de Bichos, aprovechamos para tomar unas pizzas y salimos para la tienda de Robert.
Aquí ya había ambiente de Ultra, la gente iba llegando y presentándose, y sin darnos cuenta eran ya las 00.00, hora del comienzo de este desafío, familiares y  amigos nos despidieron, tras nosotros unas cuantas bicis nos acompañaron durante muchos kilómetros.
Los primeros  kilómetros eran pura adrenalina y emoción, en ocasiones nos teníamos que parar para no separarnos muchos, la intención era llegar todos juntos. Para muchos iba a ser un verdadero reto ya que no habían corrido tanta distancia nunca y otros salían de lesiones, pero para el resto también era un reto, como todas las veces que se emprenden este tipo de distancias.


Salimos de Granada por los barrios exteriores de esta histórica ciudad, aproveché para disfrutar de la compañía de compañeros que no conocía y compartir experiencias y aventuritas, disfrutar de la fría noche por la “heladora brisa”, y sobre todo de quedarme rezagado en algún momento y apagar el frontal para correr junto a la potente sombra que nos daba esta preciosa Luna.
 Aunque parecía que nunca llegábamos, Jayena estaba esperándonos, y en ella el delicioso caldo que nos tenían preparado, unas cariñosas mujeres que nos trataron como si fuésemos todos sus hijos, que bien sentaba, además nos tenían abierto el abierto el bar para picar algo, una pasado vamos…
Después de esperar a que llegaran todos y se cambiaran, salimos con los primeros rayos de Sol, este ya no nos iba a abandonar en toda la jornada, y menos mal, porque con este viento helador…
Ahora empezaba lo duro, los metros de desnivel, y por otra parte lo bonito, y lo que realmente nos gusta a estos locos de las montañas, para mí con el aliciente de que a excepción de los últimos kilómetros no conocía.


Nuestro primer reto llegar al precioso Mirador de la Encina, desde aquí unas vistas estupendas, de los que nos quedaba y de lo que habíamos corrido, una Sierra Nevada, nunca mejor dicho, nevada, nos decía que estaba ahí y que seguía siendo la más alta, pero en esta ocasión solo vigilaba nuestros pasos, y por suerte cada vez desde más lejos, nuestro objetivo en esta ocasión era el mar.
La bajada fuerte y en sobra te obligaba otra vez a abrigarte, cruzamos algún arroyo lo cual dio un toque divertido a esta ruta y llegamos a una de las muchas bonitas vistas de las que disfrutamos en esta ruta, Ventosilla , desde aquí veíamos el mar y parecía que estábamos cerca, pero nada más lejos de la realidad, todavía quedaban muchos paisajes de los que disfrutar.


Nos poníamos en marchas después de agruparnos nuevamente, Navachica con sus más de 800 metros era el siguiente reto, bonito era y mucho, pero el increíble viento que soplaba, era en esta ocasión helador, en este trayecto se me fue un momento la olla y empecé a meterle caña para entrar en calor, que frio…, pero bueno, llegamos, y los muritos que había en la cima sirvieron para que todos nos parapetásemos tras ellos, además una sorpresa nos esperaba, un corredor de Nerja, del que no recuerdo el nombre, y que por alguna razón no pudo acudir al reto, se pegó el palizón de subirnos refrescos, galletas, agua… un detallazo, que sorpresa más grata.



Solo nos quedaba ganarnos el Cielo, y para eso por su puesto teníamos que subir al Pico del Cielo, la cruz sirvo para sacarnos algunas fotos y ver el perfil de la costa que nos esperaba en no mucho tiempo.




A menos de 15km. estaba Nerja, pero no era un paseo, la fuerte e interminable bajada hasta el barranco me dio un susto por querer ir demasiado deprisa, y no sé cómo me salve de estamparme y salir volando unos metros cara abajo, esto me sirvió para bajar más tranquilo, y disfrutar de la eterna bajada, cuando las piernas acompañan da gusto, menos mal.



Llegamos a la Fuente del Esparto después de pasar por un antiguo asentamiento de resineros, nos esperaba un preludio de lo que iba a ser Nerja, familiares y amigos habían montado un exquisito avituallamiento, chocolate, naranjas, plátanos, turrón… y un delicioso chorizo y salchichón que creo que fue lo más deseado.
 Ya no quedaba “na de na”, pero lo último se veía interminable, un sube y baja de “tetillas” de montañitas, que parecía no tener fin, pero que al final creo que fue divertido, además de que ya lo conocía, pero no después de más de 80km.
Nada más entra en Nerja nos agrupamos y tras unas palabra llenas de emoción por parte de Roberto agradeciendo nuestra participación, y la colaboración de varios compañeros, afrontamos los últimos kilómetros que nos separaban del Balcón de Europa, pronto fuimos escoltados por Protección Civil y la Policía Local, la emoción se palpaba en el ambiente, y las gentes de Nerja aplaudían a nuestro paso, en los últimos metros Pepe con megáfono en mano nos acompaña hasta llegar a una zona cortada por una cinta en la que se agolpa la gente, familiares y amigos, algunos con la camisita azul del club de Nerja, gritos y aplausos de emoción nos acompañan hasta el Balcón de Europa, abrazos,  besos, felicitaciones y fotos ponían punto final a este DESAFIO UTBN, 30 amig@s que compartimos una bonita experiencia, y dos, entre ellos Antonio, que me dio la oportunidad de realizarla, se quedaron en el camino, pero estuvieron junto con nosotros en Nerja.





Solo quedaba picar en el avituallamiento que nuevamente nos habían preparado, destacar una deliciosa palmera de chocolate…un brindis y la camiseta de finisher ponían punto final a este primer día de mis vacaciones de Semana Santa.

A muchos corredores y corredoras los veré por estas tierras corriendo en mis estancias vacacionales y a otr@s también en otras carreras, como el Ultra Aneto-Posets, la UTGS en Alquezar y la Ehunmilak…

Finalmente agradecer a Roberto, que es la segunda edición en que monta este Ultra low-cost, por su generosidad con todos nosotros y por dejarme participar, al resto del equipo Bichos, tanto familiares como amigos, al equipo de Nerja, y a todos los que se me puedan olvidar, y por supuesto al resto de corredores con los que compartí experiencias durante toda la jornada.

Un saludo a algunos que os veré mas, Daniel y Javier de Nerja, Pablo de Velez y especialmente  a ti, Antonio, gracias al cual tengo unas pequeñas agujetas que espero que se me pasen viendo los tronos esta semana…