XIV Carrera campo a través Castillazuelo-El Pueyo

Otros año más en este bonito pueblo del Somontano, el Club de Atletismo Gran Hotel Ciudad de Barbastro nos a deleitado con esta carrera, este año ha convencido a un montón de corredor@s,  unas camisetas verdes se hacían notar entre la maraña de corredores, sobre 170, !Ah¡ entre ellos los Sietamo runners, este año con tres participantes, año tras año nos vamos superando.

 Agus y el menda, salimos sobre las 10.15 de Siétamo, llegamos con hora para catar el ambiente e ir saludando a los habituales en estas aventuretas. El día acompañaba, un poco fresquito a la sombra, pero poco a poco nos íbamos  calentando con el solito que se abría paso entre alguna nube que se acercaba.

A las 12, puntualmente, se daba el pistoletazo de salida, con un amago de salida falsa por parte de alguno que tenía prisa por degustar la longaniza con que nos agasajaron al final de la carrera los vecinos del  pueblo.

 La subida al pobre Castillo, fue como su estado, "penoso", la dureza de esta rampa hizo que algunos andásemos durante algunos metros, pero superada esta "tachuela", el sol, las preciosas vistas, y un recorrido mas regular, te metían en carrera.

foto by ornitorrinco

Es un recorrido sin tregua, las subida tendida con algunas pequeñas bajadas, te plantan a los pies del Monasterio de El Pueyo, el público que nos recibe en sus faldas anima a subir. No sé hace tan duro como parece en un principio, un par de giros, un poco de riñones, y los ánimos de los tres o cuatro corredores que ya van de vuelta te dejan en el cenobio.
Aquí nos da los últimos ánimos el publico congregado, un botellín de agua calma mi garganta que va un poco tocada con la respiración tan acelerada por la carrera.

Pero, ya estamos de vuelta, ahora toca la bajada hacía Castillazuelo, dura, quizás más que la subida, vamos muy rápidos, el recorrido no da tregua, además las pequeñas tachuelas que antes eran leves bajadas, ahora se convierten en subidas que te rompen el ritmo, y que notan los riñones, por lo menos en mi "fabuloso estado de forma", el Castillo se ve cerca, una última bajada para llegar a su lado y los aplausos de un grupo de personas nos dan alas para afrontar la empinada rampa, pero en buen estado, la cual bajo como loco, y nos deja en el puente sobre el rioVero, afrontamos los últimos metros a tope, como si de un sprint se tratara, para llegar al lugar donde salí hace poco más de 45 minutos, poco después llegaría Martin, y algo más tarde, el Super Agus, valiente y atrevido, ya se ha metido en este mundo, ahora le costará dejarlo.
Durante largo rato fueron llegando los Zoitininjas, muy numerosos, y que acapararon trofeos en casi todos los podios, a los ya habituales Oscar y Suely, y algún otro, se unió en este caso, y me alegró un montón, el de María Alastruey, esto anima a seguir disfrutando de este mundillo.

Un saludo a Orni, que estaba por la zona sacando fotos, esta vez no ha corrido, pero ya esta pensando en nuevas aventuras, espero coincidir con él en alguna.
Agradecer a la organización y a los vecinos de este pueblo del Somontano su buena acogida año tras año.

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