XXXIII Andra Mariko Krosa Itxas Argia

Vaya mañana la que se presentaba, lluvia, fuerte viento…pero la cosa no estuvo mal, y menos teniendo en cuenta que era el día de los inocentes.

Esta vez no me desplacé en metro como hace tres años, decidí ir en coche, se llega en un plisplas, y dado que iba a llover preferí tener un resguardo.

A las 9, arriba, desayunito, un mini paseo a la perra para que los demás no tengan prisa por levantarse y, manos a la obra, busco aparcamiento en las cercanías sin dormirme mucho, porque la gente va llegando continuamente, y eso que faltaba más de una hora.

 

En esta ocasión no había nadie disfrazado, tan solo algún que otro gorrito de Noe, esta vez no me asusté por la cantidad de gente que había y que iba llegando, y eso que también se celebraba la carrera de Las Arenas-Bilbao, no sé exactamente cuantos estábamos pero seguro que más de 600.

Como el día estaba un poco chungo, la entrega de dorsales  se hacía dentro del polideportivo, había una cola largísima para inscribirse, ya que la mayoría de la gente se inscribe el mismo día, así que los que ya estábamos inscritos lo teníamos más fácil, menos cola.

Un poquito de calentamiento, y sobraba la ropa, me quité el chubasquero, y tan solo me dejé los guantes, que más tarde me sobraron también.

Poco después de que acabaran los peques, nos fuimos amontonando entorno a la línea de salida, estaba en primera fila, con lo que me pasarían un montón de corredor@s, no estaba tan en forma, desde hace una semana no me he puesto las zapatillas.

Y ¡pum! los jueces dieron la salida, que tiempos en los que me tocaba a mí dar la salida y tomar los tiempos, se está mejor a este otro lado de la barrera…

Este año ya me conocía el recorrido, una pequeña subida nada más empezar, para seguir  con unos continuos subes y bajas, en los que teníamos que tener cuidado con el piso que estaba mojado, más de uno probó el suelo.

Poco a poco salimos de Andra Mari, barrio que dio inicio a lo que es Getxo, hace casi 1000 años, tras pasar por un laberinto de caseríos, nos acercábamos a la costa, el olor a mar y la brisa te animaban a correr aún más, creo que era sobre el kilómetro 3, están marcados cada kilómetro, a mucha gente le gusta esto, pero yo prefiero que no lo estén,  seré un poco raro.

paseo La Galea

El paseo por toda la galea es precioso, de vez en cuando me salía del adoquinado y corría sobre la alfombra de césped, tras un largo paseo, pasamos junto al faro y vimos el recientemente remodelado Fuerte de La Galea, fortificación del s.XVIII, único en toda Bizkaia de construcción militar de ese siglo que ha sobrevivido hasta nuestros días.

Fuerte La Galea

Callejeamos un poco, y enfilamos la última bajada para pasar por La Venta de nuevo, y afrontar la subida que nos conduciría la meta.

a comer...

 

Tras cruzar la meta nos esperaba el avituallamiento, agua, acuarius, cola, caldito calentito, y unos pintxos buenísimos, ah, y una camiseta, y todo gratis, pocas carreras quedan como esta, y encima lo hacen de cine, no sé lo que tardaré en volver, dependerá de las vacaciones que cuadren, pero ganas no me faltan, buen ambiente, y un recorrido para disfrutar.

   93ª 00:35:50.43 CARLOS JABIER GARCIA LOPEZ

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QUEDADA d’ALFORJA “Ruta de las Fuentes” SILIARCA

14/12/2014

Estupenda mañana la que hemos vivido en Siétamo, la temperatura acompañaba, aunque unas nubes amenazantes, que no nos dejaron ver el sol soltaron alguna pequeña lagrima, no impidieron que disfrutásemos por los cuatro pueblos que forman nuestro municipio de Siétamo, más el pueblo de Ibieca, que también quiso colaborar en esta primera Quedada.

va llegando la gente

 

Poco antes de las 9.30 llegaban los primeros corredores y ciclistas, depositaban en las cajas que se repartirían más tarde por los distintos avituallamientos las viandas navideñas, después de algunos saludos y fotos, acabábamos de acicalarnos y, tras unas pequeñas indicaciones y pasadas las 10 de la mañana salen las casi 50 primeras bicis de montaña, algún minuto después los más de 30 corredores. Entre los corredores contábamos con la grata presencia del campeonísimo atleta de la Zoiti yassine Abatourab.

Estaba ya en marcha, la primera actividad deportiva-cultural de la Asociación Cultural  SILIARCA, una asociación que nace en el pueblo de Siétamo pero con idea de dar cabida a los habitantes de los cuatro pueblos del municipio, Siétamo, Liesa, Arbaniés y Castejón de Arbaniés.

El primer destino, Liesa, nos esperaba el primer avituallamiento navideño, las gentes de Liesa y de SILIARCA tienen todo preparado para que degustemos los primeros turrones y polvorones, y todo pasa con un poco de agua o algo mejor.

 

Saliendo del pueblo, cogemos la antigua carretera a Ibieca para desviarnos a la Ermita de Santa Maria del Monte, del siglo XIII, disfrutamos durante un momento de las vistas sobre el Somontano y obsérvanos con curiosidad los restos del antiguo castro visigodo.

subiendo a Santa Maria

Bajamos de nuevo a la vieja carretera, para continuar por nuestra ruta de las Fuentes, dejamos esta, para por pista llegar a la Iglesia de San Miguel de Foces (año 1249), único vestigio del antiguo pueblo de Foces, muchos son los que quisieron retratarse utilizando este precioso fondo, pero había que seguir ruta.

Yassine Abatourab posando con unos participantes

Arbaniés

Ibieca

Ahora nuestra camino coincidía hasta casi llegar a Arbaniés, con el Camino Natura de la Hoya de Huesca, una agradable pista nos deja en poco tiempo en Ibieca, donde también tenían preparados los turrones en el local del pueblo, dimos buena cuanta nuevamente de ellos, y salimos con algunas gotas que cesaron pronto, una pista con continuos sube-bajas en muy buen estado nos lleva a Arbaniés. En este pueblo la Asociación cultural “El Cuerno” nos tenía preparados los polvorones y demás exquisiteces frente a la Parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles, en la que pudimos admirar sus preciosas pinturas. Con los ánimos del público presente, nos encaminamos hasta la rivera del río que une nuestro municipio, el Guatizalema, corremos por su margen izquierda para llegar a la los pies de Castejón, y subimos por una antigua senda que desemboca en la plaza del pueblo donde está el local social del pueblo, disfrutamos del último avituallamiento regado con vino de Bespén.  Desde aquí ya quedan poco más de 5 kilómetros de pista, y seguimos disfrutando de una animada conversación, para en poco tiempo divisar el pueblo de Siétamo, los últimos corredores llegan sobre las 13.30, después de recorrer más de 23 kilómetros.

Un cambio rápido de ropa y todos a comer migas, casi 100 personas catamos las migas que nos ofreció la asociación Cultural SILIARCA con la colaboración de la Asociación de Amas de Casa y la ayuda de algunos vecinos de Siétamo. Con las migas no había acabado todo, Siliarca nos deleito con unos exquisitos postres, con los que no pudimos acabar, y tras esto un sorteo de dos comidas en el restaurante La Arboleda y otras dos en G&M, donadas por los mismos.

 

Todo esto ponía fin a una hermosa mañana a propuesta de la Asociación SILIARCA para unir con el deporte los pueblos de este municipio. 

XIV Carrera campo a través Castillazuelo-El Pueyo

Otros año más en este bonito pueblo del Somontano, el Club de Atletismo Gran Hotel Ciudad de Barbastro nos a deleitado con esta carrera, este año ha convencido a un montón de corredor@s,  unas camisetas verdes se hacían notar entre la maraña de corredores, sobre 170, !Ah¡ entre ellos los Sietamo runners, este año con tres participantes, año tras año nos vamos superando.

 Agus y el menda, salimos sobre las 10.15 de Siétamo, llegamos con hora para catar el ambiente e ir saludando a los habituales en estas aventuretas. El día acompañaba, un poco fresquito a la sombra, pero poco a poco nos íbamos  calentando con el solito que se abría paso entre alguna nube que se acercaba.

A las 12, puntualmente, se daba el pistoletazo de salida, con un amago de salida falsa por parte de alguno que tenía prisa por degustar la longaniza con que nos agasajaron al final de la carrera los vecinos del  pueblo.

 La subida al pobre Castillo, fue como su estado, "penoso", la dureza de esta rampa hizo que algunos andásemos durante algunos metros, pero superada esta "tachuela", el sol, las preciosas vistas, y un recorrido mas regular, te metían en carrera.

foto by ornitorrinco

Es un recorrido sin tregua, las subida tendida con algunas pequeñas bajadas, te plantan a los pies del Monasterio de El Pueyo, el público que nos recibe en sus faldas anima a subir. No sé hace tan duro como parece en un principio, un par de giros, un poco de riñones, y los ánimos de los tres o cuatro corredores que ya van de vuelta te dejan en el cenobio.
Aquí nos da los últimos ánimos el publico congregado, un botellín de agua calma mi garganta que va un poco tocada con la respiración tan acelerada por la carrera.

Pero, ya estamos de vuelta, ahora toca la bajada hacía Castillazuelo, dura, quizás más que la subida, vamos muy rápidos, el recorrido no da tregua, además las pequeñas tachuelas que antes eran leves bajadas, ahora se convierten en subidas que te rompen el ritmo, y que notan los riñones, por lo menos en mi "fabuloso estado de forma", el Castillo se ve cerca, una última bajada para llegar a su lado y los aplausos de un grupo de personas nos dan alas para afrontar la empinada rampa, pero en buen estado, la cual bajo como loco, y nos deja en el puente sobre el rioVero, afrontamos los últimos metros a tope, como si de un sprint se tratara, para llegar al lugar donde salí hace poco más de 45 minutos, poco después llegaría Martin, y algo más tarde, el Super Agus, valiente y atrevido, ya se ha metido en este mundo, ahora le costará dejarlo.
Durante largo rato fueron llegando los Zoitininjas, muy numerosos, y que acapararon trofeos en casi todos los podios, a los ya habituales Oscar y Suely, y algún otro, se unió en este caso, y me alegró un montón, el de María Alastruey, esto anima a seguir disfrutando de este mundillo.

Un saludo a Orni, que estaba por la zona sacando fotos, esta vez no ha corrido, pero ya esta pensando en nuevas aventuras, espero coincidir con él en alguna.
Agradecer a la organización y a los vecinos de este pueblo del Somontano su buena acogida año tras año.

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XV CARRERA DE MONTAÑA OS FORATOS DE LOMENAS

26/10/14

Ya son XV las ediciones de esta carrera, y es la Vª en la que participo, desde el año 2010 en el que comencé a correr carreras de montaña no he faltado a ninguna edición.

Es  una carrera entrañable, un lugar precioso, y más en estas fechas, los colores del bosque son especiales, y si el día acompaña como ha sido el caso, la gente se va súper contenta.

 

Además, aprovechamos el finde y fuimos en familia, el sábado hicimos una excursión con los niños a Cola de caballo, nos juntamos más de quince, este año de Huesca subimos un montón, así que planificamos un bonito día culminado con una estupenda cena en Broto.

Como se hacía el cambio de hora pudimos descansar una hora más y salir con una temperatura muy agradable, más de 200 corredor@s, record de participación hasta el momento, mucha gente de asfalto que quiere probar esto de correr por el monte, son apenas 21km. y menos de 1000m de desnivel y todo, en un entorno precioso que no deja a nadie indiferente, y este año con el tiempazo que nos ha acompañado menos.

un montón, pero eramos más 

 

Después de echar unas risas previas a la carrera nos disponemos a salir, me procuro colocar un poco adelante pero cada año salen más rápido y me voy quedando atrás hasta el cruce del Ara, en el que más o menos voy manteniendo la posición en los subes y bajas que nos llevan al Puente de los Navarros , aquí este año me esta animando la familia, siempre viene bien, y más cuando tengo que afrontar el tramo de pista más pesado y aburrido de la carrera, se hace un poco largo y un pelín duro, en el siguiente avituallamiento ni paro, esta vez llevo un botellín y viene de cine, este tramo de senda es muy bonito y se puede hacer muy rápido, cruzamos el rió por el puente de hierro, y emprendamos la bajada junto al camping de Valle de Bucaruelo, este tramo últimamente lo hago lento, es una pista en bajada en la que se puede correr, pero me quedo desinflado, prefiero bajar más tranquilo y reservar para la última parte de la carrera.

 

Pasamos nuevamente junto al puente y seguimos por la  margen derecha del Ara, creo que vamos por el gr. 11, una bonita senda con un pasamanos incluido con la habitual presencia del Greim, llegamos a la cota máxima de la carrera 1.260m un sendero por un sitio precioso, en más de un momento desvié la vista hacia abajo y daba miedo, mejor mirar para adelante, y disfrutar del recorrido.

Empezamos la bajada al camping de San Antón, una bajada en la que voy a saco, aquí paso a un montón de gente, disfruto como un niño.

Ya en el camping tan solo cojo un poco de naranja, y sin parar me dispongo a afrontar la última tachuela, que se hace dura a estas alturas de la carrera., pero después de esto, apenas queda un poco de sube y baja, y una última y pequeña bajada hasta la carretera. Doy todo lo que me queda para poder superar los últimos metros por la carretera, y subir hasta la plaza en la que son bien recibidos los aplausos tras oír tu nombre.

Esta vez tuve que esperar yo a la familia, ya que se habían ido al Puente de los Navarros y debían de estar volviendo, pude aprovechar para charlar con corredores y con los compañeros de Huesca que iban llegando poco a poco, el tiempo acompañaba y no daban ganas de irse a duchar.

Iban llegando los corredor@s hasta completa los casi 200 que tomaron la salida, creo que apenas hubo algún percance, con lo que podemos decir que fue todo un éxito que culminó con una comida.

El próximo año volveremos otra vez, es un clásico para culminar la temporada de carreras de montaña, en el que aprovechas para hacer turismo y encontrarte con un montón de amigos… 

GORBEIA SUZIEN

18/10/14

Vuelvo otra vez a correr a mi tierra, esta es la segunda carrera después de la Kosta Trail, en la que disfruté muchísimo, tanto con la carrera como con el paisaje. En esta ocasión pasé el viernes con la familia en Romo y me desplacé a Zeanurí, llegué con más de una hora de adelanto pero el pueblo estaba petado de coches, tuve que aparcar en el quinto pino, pero bueno, merecía la pena, así pude divisar las estupendas vistas que tenía.

el viernes de paseo por mi tierra

Bajé a por el dorsal y dejé la bolsa para la ducha, ya estaba listo para disfrutar de un gran día. Me estuve empapando del gran ambiente que había en la plaza del pueblo, inchables para  los niños, puestos con tiendas de ropa de deporte, productos de la huerta, quesos, pasteles…

El colorido de las diferentes equipaciones daba un colorido especial a la plaza, entre ellos destacaban los del equipo sestaotarra, grafsestao, del que salió el a la postre ganador de la prueba, Ionut Zinca, recuerdo cuando corría en el equipo de carreras de orientación de la capital alavesa, ha sido siempre una máquina.

 

Después de saludar a Monrasin, y como no, de pedir que me retratara, me metí en el cajón de salida, mientras esperábamos conversando con el resto de corredores nos presentaron a los 50 primeros dorsales y  homenajearon a la selección de Euskadi de carreras de montaña.

el ganador Ionut con super Ramón

 

9,15 y salida, sin cohete ni nada, todos “palante”, esta vez me coloqué muy atrás, con lo que las estrecheces, primero del puente y luego de las muchas sendas, hicieron que me quedara muy atrás, pero bueno, esto me daba tiempo en muchas ocasiones de disfrutar del precioso paisaje.

Salí con un botellín de agua en la mano, nunca lo había llevado y pensaba dejarlo en el primer avituallamiento, pero finalmente me acompañó durante toda la carrera, y la verdad me sentó de maravilla, hacia calor y bastante humedad.

Iba entrando en calor, pasamos por una fuente en la que nos ofrecieron un vaso de agua que no rechacé, nos esperaban mas de 1000m de desnivel para llegar a Lekanda, una subida en al que podías aprovechar para disfrutar de las excelentes vistas en las paradas que se producían cuando el camino se estrechaba o en la zona equipada con cuerdas, todo ello en presencia del “Dron” que no nos quitaba ojo…

 

El primer avituallamiento ofrecía un buen surtido, aparte de lo habitual, encontrábamos un surtido de pastelitos que en otra ocasión hubieran sido arrasados en su totalidad, pero había que mantener la línea…

La subida fue dura y larga, pero todo se acaba, una bajada rápida y nos plantamos en el segundo avituallamiento, desde aquí se divisa nuestro próximo y deseado objetivo, la cumbre del emblemático Gorbeia, nunca he subido esta cumbre, por una cosa o por otra, siempre era fallido el intento, unas veces la niebla, otra la mala previsión, el caso es que hasta ahora no había estado tan cerca de conseguirlo.

Enseguida nos plantamos en sus faldas, la última y empinada rampa se hizo dura, pero subía con muchas ganas, y el numeroso público presente en la zona animaba sin parar.

Su impresionante cruz ya estaba ahí, ¡había llegado!, una inspiración profunda, y una mirada a mi alrededor para contemplar la belleza del entorno, y para abajo.

Esto no se había acabado, una bajada de unos 5km y uno control para volver a subir la última de las “cimas”, esta vez bastante mas corta, la cota de 1.153m no se hacía muy larga, desde aquí hasta la meta prácticamente todo era bajada, a excepción de una tachuelita.

 

Unos ocho kilómetros de bajada, se hacían bastante largos para llegar al último avituallamiento, un poco de hidratación y a por la tachuelita famosa, que según contaban se hacía dura a estas alturas de carrera.

Tenían razón, se hacía dura, el calor que nos acompañó todo el día, y la humedad en la zona boscosa, hacían mella en muchos corredores que se quedaban poco a poco atrás y, a los que iba sobrepasando. Nuevo e inesperado control,  para bajar a saco, con susto incluido, casi me tropiezo con una raíz en una zona empinada, menos mal que no caí, sino…

Salimos a la carretera, ya se olía la ternera que estaban asando en la plaza, un último esfuerzo y los aplausos me metieron bajo el arco de meta.

Una carrera estupenda, para repetir, ambiente, logística, entorno, y climatología, todo acompaño, además en mi tierra, que más se puede pedir…¡pues sí!, un chaleco estupendo con una cervecita de la zona que nos dieron en la bolsa de corredor.

Tras una ducha un poco peculiar, llego la comida en el frontón, una ensalada con una ternera con certificado Eusko Label, que estaba buenísima, no dejé ni el hueso… 

hasta el año que viene...